Un toque y rebote

Una pelota de campo quemado, un toque sin que bote en mi terreno, si no rebote en otros.

No me toque los colmillos, ni me pinches el cuello, ni me lo toques con tus manos, a veces los sueños se convierten en pesadillas, aunque la vida me tratase asi, voy a ser fuerte, para saber cual es la anestesia de mi, perdonarme a mi y repararme de este dolor.

Para lo que necesite. estoy yo, no necesito a nadie, que me diga ni de que sus errores y que me las devuelvan como o las que no son mías.

Arranco de todas, sin un veneno como combustible, mi energía es biodegradable, es el sol, el agua, el viento, el aire.

A lo mejor era rebotarme lo que necesitaba y votar a algunas cosas, motivos, situaciones y razones.

No me asusta la pesadilla, se creo por un malestar físico y de el imperio toda la noche, oscura pero ahora tengo otro despertar.